Lino relatos 20 de octubre

Lino Plaza Tuñón, (Lekaroz-Navarra 1939 – Matalebreras-Soria 2009) falleció en un accidente de tráfico, en una fatídica carretera denominada N-122 en el km 118 un martes 20 de octubre a las 16:40 h, tenía 70 años, 1 mes y 16 días.

“Lino Plaza arquitecto, tu eres el rey del rugby en España…. ” canta la copla y así le recordamos después de 16 años de su ausencia. La trágica noticia fue recogida por muchos medios periodísticos y se escribió mucho sobre él, colocando en la memoria colectiva además de unos someros retazos de su personalidad y profesión, principalmente lo que había supuesto para el Rugby en España y su actividad polifacética en este deporte.

Pero todo lo que dijeron no era apenas nada, y mucho menos, consuelo para todos aquellos que formábamos parte de “La Escuela” como se conoce a nuestro Club sabiendo, sin asumir, que ya no íbamos a tenerle cerca.

Conocía el Rugby como pocos, enseñaba aplicando organización y método, gestionaba personas –nos cui- daba-, y además… abría los vestuarios, se encargaba de lavar las camisetas (en aquel entonces se entregaban y se recogían después de cada partido), mantenía completo el botiquín y hasta daba masajes,… y organizaba giras y clinics, … todo ello con una pasión contagiosa que marco a muchos generaciones de jugadores. Fue el líder por excelencia, “primero el ejemplo y luego no pedir nada a cambio”, bueno si, pedía que te entregaras a fondo con tu esfuerzo, que respetaras el esfuerzo de tus compañeros y amigos, que te divirtieras y disfrutaras jugando, que compartieras las victorias y las derrotas en unos terceros tiempos inolvidables.

En la calle Lira 4, su domicilio en Madrid, y a todos los efectos el “headquarters” de la Escuela a la vez que “residencia” de estudiantes foráneos, se fraguaban los planes y estrategias del Club, se planificaban tempora- das y todo ello como excusa de una comilona de alubias rojas, morcillas y otras exquisiteces baztanesas con las que Lino cumplía con pasión y se sentía feliz cocinar y comer con sus amigos.

Aunque Lino solo habrá uno, su influencia fue y seguirá siendo ineludible para todos nosotros, obviamente afectiva en todos, y práctica en alguno de sus pupilos aventajados como Javier Olaciregui Arrieta, amigo y socio a pesar de ser guipuzcoano como le “solía cuestionar”.

Hoy, por muchas circunstancias, es posible que muchos jugadores de La Escuela el nombre de Lino Plaza ni siquiera les suene, al igual que otros nombres como MariJuana Ontañon (presidenta) cosa que a otros mu- chos nos parece una anomalía injustificable, pero estoy convencido de que seremos capaces de reconducir y inculcar de nuevo nuestra cultura y valores de Club

Lino allá donde estés, mantén tu inspiración sobre nosotros. No te olvidamos

Felipe Blanco.

Ex-jugador y socio del CDA. Padre y abuelo de jugadores.

Felipe, Manolo, Roger, Marijuana, Pajarito y Lino.